Elegantes, profundos, vibrantes: los azulejos azules transforman cualquier superficie en un elemento distintivo, capaz de aportar carácter y sofisticación a cualquier proyecto. Descubre la colección de azulejos Marazzi en todos los tonos de azul, desde azul marino hasta cobalto y azul celeste.
Desde el azul claro brillante hasta el cobalto profundo, pasando por el azul verdoso, azul petróleo y turquesa: los tonos de azul otorgan a las habitaciones una fuerza cromática que va más allá de las tendencias pasajeras.
Símbolo de equilibrio y sofisticación, el gres porcelánico azul es adecuado para ser el protagonista tanto en interiores modernos como en los más clásicos o mediterráneos. En sus infinitos matices, se adapta tanto a suelos como a revestimientos, dando personalidad a las habitaciones que decora.
Usar azul en azulejos de suelo y revestimientos significa elegir un color que estimula la creatividad, realza la luz y amplifica la identidad de la habitación.
Las colecciones de Marazzi ofrecen una amplia gama de acabados, desde motivos de mosaico hasta texturas de efecto papel pintado, pasando por superficies brillantes, estructuradas o de efecto mármol, todas diseñadas para adaptarse elegantemente a diferentes estilos y contextos.
El gres porcelánico es la solución ideal para quienes desean un suelo duradero, fácil de mantener y visualmente impactante. Usado para cubrir el suelo, el gres porcelánico azul asegura durabilidad y estabilidad a lo largo del tiempo, haciéndolo perfecto para cada habitación de la casa: desde el baño hasta la cocina, pasando por la zona de estar y espacios exteriores como terrazas y balcones.
Gracias a la variedad de acabados ofrecidos por Marazzi, el gres azul se puede combinar con materiales naturales como la madera y el barro cocido, o elementos contemporáneos como encimeras de piedra y detalles metálicos. Las superficies brillantes amplifican la luminosidad de las habitaciones, mientras que las más oscuras o mates crean atmósferas envolventes, con un impacto visual refinado y moderno. El efecto mármol en tonos azules añade un valor adicional, otorgando al suelo una identidad fuerte y distintiva.
Los azulejos de suelo azules se adaptan perfectamente tanto a contextos minimalistas como a interiores más tradicionales.
El azul oscuro, por ejemplo, es ideal para quienes buscan una estética elegante y atemporal, capaz de realzar salas de estar, entradas o baños con un toque sofisticado. Los azulejos de diamante reflejan la luz de manera dinámica, creando superficies ricas en matices, mientras que los motivos de mosaico permiten definir detalles decorativos únicos, ideales para paredes de acento o nichos arquitectónicos.
El gres porcelánico azul también se adapta perfectamente a entornos exteriores, ofreciendo soluciones resistentes para cubrir áreas más expuestas.
Tonos intensos como el azul verdoso o el azul petróleo se mezclan perfectamente con elementos naturales como la piedra y la madera, creando superficies acogedoras y visualmente armoniosas.
Con Marazzi, incluso los espacios exteriores se convierten en una parte integral de un proyecto de diseño coherente, elegante y funcional.
Elegir azul para el baño significa crear un espacio regenerador, sofisticado y visualmente envolvente.
Los azulejos de baño, especialmente en el tono de azul marino, evocan inmediatamente atmósferas de spa, gracias a su capacidad para reflejar la luz y transmitir un profundo sentido de calma.
Los tonos disponibles van desde el suave azul claro hasta el más decidido turquesa, pasando por los tonos intensos del azul verdoso y el azul petróleo, ofreciendo una amplia paleta para personalizar cada rincón del baño, desde la ducha hasta el área del lavabo.
La integración de formatos pequeños, superficies estructuradas y detalles de mosaico permite crear composiciones decorativas sofisticadas, perfectas para definir áreas funcionales o puntos focales.
Las colecciones de Marazzi ofrecen combinaciones de texturas, efectos materiales y formatos que realzan incluso los espacios más pequeños, con soluciones diseñadas para durar en el tiempo y resistir la humedad típica de esta habitación.
Las duchas a ras de suelo y las paredes del baño pueden convertirse en verdaderos elementos de mobiliario gracias al uso de azulejos brillantes o con efecto papel pintado, capaces de amplificar la profundidad visual y realzar la luz. Las superficies brillantes reflejan los colores y las habitaciones circundantes, creando una iluminación más intensa y dinámica, ideal para entornos contemporáneos.
Para quienes buscan un toque decorativo más refinado, los azulejos reinterpretados en clave moderna representan una alternativa perfecta. También disponibles con texturas en relieve, estos azulejos azules añaden movimiento y personalidad a las paredes de la ducha, combinándose armoniosamente con elementos cerámicos o acabados más sobrios.
El uso de gres porcelánico azul tanto para suelos como para revestimientos permite lograr un efecto de continuidad visual que amplía el espacio y realza el diseño interior. Las colecciones de Marazzi permiten diseñar habitaciones coherentes y bien equilibradas, donde el color se convierte en el hilo conductor. Los azulejos de suelo de gres azul, combinados con los mismos tonos en las paredes, crean un aspecto envolvente y relajante, ideal para un baño contemporáneo y sofisticado.
Para los revestimientos de paredes, los azulejos cerámicos ofrecen un excelente rendimiento estético y funcional. Gracias a la variedad de acabados y formatos disponibles, es posible alternar superficies lisas con texturas estructuradas, o jugar con contrastes de color y brillos para dar ritmo y dinamismo a la habitación, sin sacrificar la practicidad
Intenso, acogedor, refinado: el azul es un color que da una identidad fuerte a la cocina, convirtiéndola en un espacio elegante y funcional al mismo tiempo. Los azulejos azules usados para el salpicadero de azulejos transforman el espacio en un lugar de expresión estilística, donde cada detalle contribuye a crear armonía. Dependiendo del tono elegido, es posible evocar diferentes atmósferas: desde el encanto rústico con los tonos de azul petróleo, hasta el sabor mediterráneo del turquesa, hasta la limpieza formal de un estilo minimalista basado en tonos oscuros y mates.
Las combinaciones con materiales como madera clara, encimeras de piedra o detalles metálicos crean contrastes equilibrados y sofisticados, realzando la personalidad del ambiente de la cocina.
Marazzi ofrece soluciones en cerámica y gres porcelánico azul diseñadas para durar en el tiempo, fáciles de mantener y capaces de integrarse perfectamente en cualquier proyecto de diseño interior.
En las cocinas más refinadas, los revestimientos de paredes se convierten en una verdadera herramienta decorativa. Los azulejos azules, en tonos de cobalto y turquesa, cubren las paredes con fuerza expresiva y un fuerte impacto visual. Su presencia puede modularse según el estilo elegido, ya sea como un fondo cromático dominante o como un acento que realza nichos y porciones de la pared.
El salpicadero de efecto azulejo, con su diseño decorativo y acabados brillantes, representa una alternativa atemporal, capaz de combinar tradición y contemporaneidad. Gracias a los múltiples formatos y motivos ofrecidos por Marazzi, es posible combinar estética y funcionalidad, obteniendo paredes fáciles de limpiar pero siempre estéticamente coherentes con el contexto.
El gres porcelánico azul es una de las mejores opciones para el suelo de la cocina.
Resistente al desgaste, manchas y productos químicos, este material también se destaca por su superficie antideslizante, haciéndolo seguro y práctico incluso en presencia de agua o vapores. Los azulejos de gres azul son ideales para quienes desean combinar estética y rendimiento técnico, manteniendo la elegancia cromática del azul sin comprometer la funcionalidad.
Los tratamientos avanzados de superficie garantizan un excelente rendimiento a lo largo del tiempo, incluso en entornos sujetos a tensiones diarias. Ya sea optando por acabados brillantes, mates o estructurados, el suelo de gres porcelánico azul de Marazzi se convierte en un elemento distintivo de la cocina, realzando el mobiliario y completando el espacio con un toque de originalidad.
Los azulejos azules representan una solución de mobiliario capaz de reemplazar la pintura tradicional con carácter. Más resistentes, fáciles de limpiar y con un rendimiento estético superior, permiten transformar paredes en habitaciones como salas de estar, estudios, entradas e incluso escaleras, en superficies decorativas y funcionales. El uso de gres porcelánico o cerámica también permite elegir entre acabados brillantes, efecto mármol, mosaico o estructurados, creando proyectos personalizados donde el color es el protagonista.
El azul, en todos sus tonos, se presta a ser combinado con gran flexibilidad con tonos neutros como blanco, gris o beige, pero también con tonos más complementarios, como el verde oliva o mostaza, para un efecto gráfico más pronunciado. Cada composición se convierte así en un ejercicio de estilo donde forma, luz y material se fusionan en un equilibrio refinado y duradero.
La intensidad y profundidad del azul varían según el tono elegido.
El azul claro es perfecto para habitaciones luminosas, donde se desea una atmósfera fresca y relajante. Ideal en salas de estar de espacios abiertos o estudios con abundante luz natural, promueve una sensación de amplitud. El cobalto, más decidido e intenso, es adecuado para crear acentos visuales importantes, perfecto para paredes de entrada, cabeceras o rincones de estudio. Se puede usar como una banda decorativa o como el elemento dominante, para combinar con materiales como madera clara o metal.
Una mezcla de mosaico y color sólido permite diferenciar áreas funcionales, como crear un marco decorativo en una pared equipada, o resaltar un hueco o nicho.
Las colecciones de Marazzi ofrecen numerosas soluciones que permiten jugar con contrastes y texturas, para paredes que dialogan con la arquitectura circundante y realzan sus geometrías.
Además de ser protagonista de las superficies, el azul puede convertirse en una herramienta poderosa para realzar el diseño interior.
Dependiendo del tono elegido, se puede usar como una base neutra para unificar el espacio, o como un elemento de acento para dar ritmo visual a una habitación. Los azulejos azules, ya sean de efecto mármol, color sólido o decorados, permiten crear un telón de fondo armonioso sobre el cual destacar muebles, obras de arte o detalles arquitectónicos.
Las combinaciones más refinadas ven el azul emparejado con gris perla, para un efecto sobrio y elegante, o con arena, para calentar la composición. Los acentos dorados añaden un toque de lujo, mientras que el verde oliva permite crear atmósferas más naturales y acogedoras. Los formatos y acabados propuestos por Marazzi acompañan y realzan estas elecciones cromáticas, ofreciendo continuidad entre paredes, suelos y mobiliario para un resultado siempre coherente e impactante
La fuerza decorativa de los azulejos azules se maximiza gracias a la variedad de formatos y acabados disponibles en las colecciones de Marazzi.
Cada formato, cada superficie, contribuye a definir la identidad de un espacio, mejorando la percepción del color y modulando el efecto final según la luz, el uso previsto y el estilo del mobiliario.
El diseño de superficies comienza con la elección del formato. Los azulejos rectangulares son perfectos para instalaciones horizontales o verticales que alargan visualmente los espacios, mientras que los azulejos cuadrados transmiten una sensación de orden y proporción, ideal para entornos clásicos o contemporáneos. Los azulejos hexagonales añaden dinamismo y se prestan a combinaciones de colores animadas, especialmente en cocinas o baños con un fuerte carácter.
El mosaico, por otro lado, encuentra su máxima expresión en detalles: perfecto para nichos, duchas a ras de suelo, inserciones decorativas o paredes focales.
Los formatos pequeños, utilizados en contraste con grandes superficies, permiten construir juegos geométricos refinados y acentos visuales dirigidos. El formato grande, por el contrario, es ideal para entornos amplios y modernos: reduce las juntas y amplifica el efecto de continuidad, haciendo el espacio más elegante y coherente. La diferencia entre módulos regulares y geometrías más articuladas influye directamente en la percepción del ambiente, ofreciendo amplio espacio para la personalización.
La elección del acabado afecta profundamente el resultado final del color azul. Las superficies brillantes, al reflejar la luz, realzan el brillo de tonos más vibrantes como el azul claro o el turquesa, creando entornos dinámicos y luminosos. Los acabados mates, en cambio, suavizan los reflejos y ofrecen una apariencia más natural y relajante, perfecta para entornos íntimos y sofisticados.
Las texturas de efecto piedra, cemento o mármol añaden una dimensión material adicional al color azul, proporcionando una sensación táctil auténtica y profunda. Estas superficies se prestan a proyectos de diseño interior elegantes y atemporales, donde el equilibrio entre forma y función es esencial.
