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En la hostelería, el baño es uno de los espacios que más ha evolucionado en los últimos años, con la eliminación de la tradicional disposición separada y con el descubrimiento de usos inéditos de los materiales cerámicos: desde las decoraciones que transforman las paredes, hasta la imitación de la madera, el cemento y las piedras naturales, que interpretan los acabados más frecuentes en las habitaciones de hotel contemporáneas.
En la hostelería, el baño es uno de los espacios que más ha evolucionado en los últimos años, con la eliminación de la tradicional separación con respecto al dormitorio. La bañera se sitúa en el centro de la estancia; los lavabos se convierten en diafragmas ubicados en espacios continuos, sin elementos netos de separación. Alejándose del concepto de la cabina, la ducha se unifica con las paredes y el suelo de la habitación. En este lugar de funciones híbridas, los materiales de revestimiento se vuelven esenciales, tanto para caracterizar el espacio como para su mantenimiento. El material cerámico ofrece gran versatilidad a las paredes con su variedad de decoraciones y formatos, que van desde la placa grande hasta el mosaico. La imitación de la madera, el cemento y las texturas de las piedras naturales, interpretadas fielmente en el gres porcelánico, transmiten valor y belleza al ambiente, y trasladan los acabados más frecuentes en las habitaciones de hotel contemporáneas a las superficies del baño, que son las más expuestas al agua y el desgaste.
