Villa Leonida, realizada por el arquitecto Giuseppe Passaro de GPaSTUDIO, es una casa inmersa en la naturaleza, sin barreras visuales, que crea continuidad entre los materiales autóctonos y los que introduce la arquitectura. Gracias también al gres porcelánico de las colecciones Mystone y Grande, utilizadas como revestimiento de la fachada
Nos encontramos en Ventoso, una localidad con poco menos de 2000 habitantes que pertenece al municipio de Scandiano (Reggio Emilia).
Villa Leonida, realizada sobre la base de un proyecto del arquitecto Giuseppe Passaro de GPaSTUDIO, es fruto de los deseos de una familia enamorada de la naturaleza y los espacios abiertos, que soñaba con una residencia sin barreras visuales que permitiera disfrutar del panorama circundante.
El diseño, que observa el entorno y la morfología del terreno, respeta las reglas impuestas por la naturaleza del lugar: una gran piedra, la parte del semisótano del edificio, frena y sostiene una estructura que permanece en voladizo sobre ella, y evita que se deslice por la ladera. Aquí, los colores y la esbelta silueta de los árboles embelesan la vista.
Además, gracias a la discreta pendiente de la colina, se disfruta de una bella vista panorámica de Scandiano y del fondo del valle.
La parte de la casa situada en el semisótano se destina a la zona de servicios y está hecha enteramente de cemento armado (arenado y pulido), mientras que en la planta superior se encuentra la zona de estar, un amplio espacio abierto de doble altura donde la escalera helicoidal de hierro lleva a un altillo-biblioteca que se extiende hasta el interior de la cocina, la cual a su vez también es de doble altura.
El proyecto se ha ideado para obtener contrastes netos y marcados, en busca, por una parte, de un equilibrio con el valle y la colina de los que forma parte y, por otra, de una continuidad entre los espacios interiores y exteriores. “Un contraste formal, espacial y matérico, además de un deslindamiento entre luces naturales y artificiales. Este ha sido el hilo narrativo de una idea de proyecto basada en el concepto de la esencialidad —explica el arquitecto Passaro—. En la residencia, la pared norte muestra la superficie de madera, mientras que bajando por la colina, donde el valle permite percibir numerosos matices de gris, el edificio retoma la piedra gris en la fachada, unida a placas que revisten las paredes y a la cubierta de junta alzada de zinc-titanio del edificio”.
El gres porcelánico, que interpreta fielmente las características estéticas de la piedra natural, ha constituido un aporte fundamental a esta intervención: las fachadas ventiladas se han realizado con Mystone Quarzite Platinum, yuxtapuesto a la colección Grande Metal Look, en color Iron Dark, para obtener una imitación del hierro natural. En el interior, para el revestimiento y el suelo de los baños se han utilizado las placas de gres porcelánico de la colección con Grande Marble Look Imperiale, caracterizado por el veteado y los matices que destacan sobre la uniformidad de las demás superficies.