Cuando el espacio facilita el aprendizaje

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Cuando el espacio facilita el aprendizaje

Una escuela segura y confortable. No solo con un buen rendimiento energético, sino también bonita, sostenible e inclusiva. Se trata de la ampliación de la escuela secundaria de Monastier di Treviso de Mate Engineering, premiada en el concurso La Ceramica e il Progetto (Cerámica y Diseño), que muestra una utilización profusa del gres porcelánico

Un centro docente moderno y energéticamente eficiente, con un diseño de interiores sencillo pero colorido y acogedor, estrechamente vinculado al exterior y a la naturaleza. Es la nueva escuela secundaria de primer grado de Monastier di Treviso, diseñada por Mate Engineering y galardonada en el concurso La Ceramica e il Progetto (Cerámica y Diseño) 2022 en la categoría “Institucional – Decoración urbana”, que selecciona las mejores obras arquitectónicas en las que los materiales cerámicos forman parte integrante del proyecto.

La obra se realizó para rehabilitar un edificio de principios del siglo pasado, que consumía mucha energía y no cumplía con los requisitos de seguridad ni con la normativa antisísmica. La base del proyecto era la consecución de los altos estándares de sostenibilidad ambiental delineados en las directrices del Ministerio de Educación, Universidad e Investigación (MIUR) italiano: mejorando la envolvente del edificio y las instalaciones, el centro escolar se ha convertido en un conjunto de “edificios de consumo de energía casi nulo” (nZEB). Al conjunto original se le añadió un nuevo volumen sismorresistente, equivalente al 25 % del volumen edificado ya existente, completamente libre de barreras arquitectónicas y, sobre todo, con un consumo energético muy reducido.

Para el nuevo edificio se prestó especial atención al estudio de la domótica, el uso de materiales sostenibles y la iluminación de las aulas con luz natural. “El entorno físico de los espacios educativos —señala el arquitecto Maurizio Pavani, fundador de Mate Engineering—, es decisivo para la calidad del aprendizaje y el desarrollo psicofísico del estudiantado: condiciona su comportamiento, fomenta la socialización y puede incidir en el rendimiento escolar”. Para incorporar el bienestar y el desarrollo adecuado de la actividad didáctica, Mate Engineering adoptó soluciones de confort térmico, salubridad del aire y confort acústico con falsos techos fonoabsorbentes. También creó amplias zonas acristaladas por las que entra la luz del sol, controlada por los voladizos de la envolvente, que actúan como protecciones solares, y por toldos externos filtrantes y motorizados. “Los acristalamientos del suelo al techo garantizan la continuidad visual y la accesibilidad al entorno natural, que se convierte en una prolongación de los espacios educativos”.

Es importante que la escuela se abra al territorio para convertirse en un lugar de referencia para la comunidad. Por eso, la entrada no es solo un atrio, sino un ágora abierta, y los pasillos no son solo distribuidores, sino lugares donde socializar. Las nuevas aulas se configuran en función de la asignatura impartida: los pupitres pueden disponerse en forma de platea, rectángulo, islas, herradura, anfiteatro o serpenteantes.

Se ha hecho un uso abundante del gres porcelánico en el suelo y también como revestimiento en los aseos. “Nos decantamos —prosigue Pavani— por un producto que englobara una estética elegante y luminosa y aspectos funcionales de gran importancia para un edificio escolar, como la durabilidad, las características antideslizantes y la facilidad de limpieza y mantenimiento”. La colección Stream de Marazzi (color Ivory en formato 60×60), hecha con un 40 % de material reciclado, se utiliza sin solución de continuidad en los espacios. En cambio, el gres porcelánico del sistema Autonomy se utiliza para crear franjas de encaminamiento podotáctiles para personas ciegas y con discapacidad visual, que generan códigos de atención (salida/llegada) y proporcionan indicaciones para girar. Autonomy se compone de azulejos en formato de 20×20 cm con formas geométricas en relieve y colores (Panna para rectas / Giallo para paradas), que cumplen con los requisitos de señalización estándar a nivel europeo. Para los encaminamientos rectilíneos también está disponible el formato de 30×30 cm. Estos dos formatos permiten realizar recorridos podotáctiles de 40, 60 u 80 cm de ancho.

“En general —termina diciendo Pavani—, nos interesaba conseguir homogeneidad en los acabados internos sin tener que diferenciar los espacios en común y las aulas didácticas. Y también queríamos crear espacios cómodos e inclusivos, con tonalidades cálidas y personalidad doméstica”.

Fotografía Federico Covre